Artículo escrito por “La Veronica”
Si premia a la muerte, un trabajo sobre “ILE”, porque obviamente son cínicos pero políticamente correctos.
Para que la sociedad acepte el aborto, no podían seguir llamándolo aborto. Cuando uno piensa en aborto, suceden en nuestras cabezas imágenes de sangre y muerte. Inmediatamente algo instintivo que te una a la supervivencia de la especie, te genera rechazo. Entonces había que manipular el lenguaje, “ILE”. Algo totalmente abstracto, si te digo ILE, ¿te viene alguna imagen a la cabeza? Por lo menos, a mí no. Encima vivimos a mil, súper distraídos. Hay que hacer el trabajo mental, de frenar y pensar que te dicen.
No fue la única manipulación de la realidad para llegar a la aceptación del aborto por parte de la sociedad. Contratar a famosas, que de repente parecía que todas habían abortado alguna vez, apoyando esa nefasta ley. Haciendo un show de pañuelitos verdes en el congreso. Siempre mucho continente y poco contenido. Y el contenido de todas era el mismo. Se ve que todas recibieron el mismo libreto.
Y después los profesionales de la salud. ¿Todavía les llamamos profesionales? Porque entre la barbaridad del aborto y lo que sucedió en la pandemia, somos más sicarios de la OMS que profesionales. Dijeron hay 500.000 abortos al año, y desde que se legalizo hubo menos de 200.000. Y las estadísticas reales del ministerio de salud –previo al aborto legal- sobre muerte materna provocado por aborto clandestino no llegaban a 40 en todo el país. Pero todos famosos, periodistas, profesionales de la salud se cansaron de decir que morían miles de mujeres por aborto clandestino.
Manipularon el lenguaje, las cifras y también la ciencia. Un ministro de salud se animo a decir que un ser humano fecundado es un fenómeno, el fenómeno es él que llego a ministro.
Les guste o no la “ILE” es muerte y el Estado la premia con el dinero de nuestros impuestos.
“El amor es más fuerte que la muerte” Cant 8, 6.
Habrá que mirarlo a Él y seguir
